En el sector privado, los llamados sistemas aislados encuentran aplicación en campings, barcos, granjas o en segundas viviendas, donde satisfacen plenamente su deseo de comodidad. Según su necesidad, le permiten emplear diversos tipos de aparatos, desde lámparas de de bajo consumo hasta frigoríficos y televisores de corriente alterna. Donde quiera que se encuentre, ya sea mar adentro o en el campo.
Estos sistemas se dividen en tres tipos distintos:
- El primero es el acoplamiento directo de la generación y el consumo de corriente eléctrica.
- La segunda posibilidad consiste en el almacenamiento de la corriente generada en acumuladores solares especiales a fin de disponer de corriente también por la noche o en periodos de mal tiempo.
- Y finalmente, la solución más cómoda, que además de contar con un almacenamiento mediante acumuladores, también suministra corriente alterna de 230 voltios, la habitual en los hogares.