En la actualidad existe una creciente demanda en cuanto a las energías renovables debido al calentamiento global y a la emergencia climática que provocan algunos sistemas de climatización más tradicionales que desprenden gases de efecto invernadero al utilizarlos. Entre ellos, podemos destacar el dióxido de carbono (CO2).
Por este motivo, durante los últimos años han surgido nuevos sistemas de climatización basados en estas energías renovables con la intención de transitar hacia un futuro más ecológico, sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
Entre estos nuevos sistemas de climatización, por ejemplo, podemos destacar la aerotermia. Se trata de un tipo de energía renovable que, pese a que, para muchas personas sigue siendo bastante desconocida, se posiciona como una de las alternativas principales en la consecución de un futuro mucho más sostenible y ecológico.
Tal vez este desconocimiento sea el causante de que a su alrededor exista un halo de misterio donde se difunden bastantes mitos e inexactitudes que deben ser explicadas y solventadas. Por este motivo, en este artículo, vamos a hablarte de los mitos y las realidades sobre la aerotermia en climatización.
¿Qué es la aerotermia?
Para tratar de arrojar un poco de luz sobre este tipo de sistema de climatización, podemos decir que la aerotermia es un sistema que utiliza un tipo de energía renovable. Es decir, que utiliza la energía que se encuentra en el propio aire para obtener calefacción y agua caliente sanitaria. Pero también sirve para proporcionar refrigeración en el interior de nuestros hogares e incluso es posible utilizar este tipo de energía para calentar el agua de una piscina, por ejemplo.
Todo ello es posible gracias al uso de una bomba de calor reversible que logra funcionar gracias a la diferencia de temperatura que existe entre el interior del hogar y el aire del exterior, gracias a la instalación de dos unidades. Por este motivo, es capaz de climatizar de forma eficiente y limpia el interior de nuestro hogar, proporcionando refrigeración en verano y calefacción en invierno.
Además, debido a que este sistema funciona gracias a la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior, tan sólo necesita un pequeño porcentaje de energía eléctrica para funcionar. Por este motivo, al apostar por la aerotermia, se produce un gran ahorro en la factura de la luz a final de mes. Sin embargo, como muchas personas todavía tienen dudas sobre su eficacia, vamos a exponer algunos de los mitos más frecuentes sobre este sistema de climatización para el hogar.
La aerotermia sólo funciona en lugares cálidos
Este es claramente uno de los mitos principales y más extendidos que existen sobre la aerotermia. Como hemos comentado con anterioridad, este es un sistema de climatización que aprovecha la temperatura del aire del exterior para calentar o refrigerar nuestro hogar, gracias al uso de una bomba de calor reversible. Por este motivo, un sistema de aerotermia es capaz de proporcionar calefacción en invierno y refrigeración en verano.
Es cierto que no funciona de manera tan eficiente en aquellas zonas donde la temperatura cae de los -20ºC, sin embargo, en los países nórdicos, -como Noruega, Suecia, Finlandia o Estonia- más del 50% de los hogares ya cuentan con aerotermia como sistema de climatización, tanto para los meses invernales como los estivales. Por este motivo, podemos afirmar que la aerotermia también funciona de maravilla en lugares muy fríos.
El gas es más barato que la aerotermia
Esta afirmación se puede deber a que es cierto que el coste inicial de realizar una instalación de aerotermia es bastante más elevado que el hecho de instalar una caldera de gas. Sin embargo, podemos rebatir esta afirmación fácilmente, ya que, el consumo de gas es bastante elevado, mientras que una instalación de aerotermia es de bajo consumo y gasta sólo una pequeña cantidad de electricidad.
Por este motivo, a medio y largo plazo el hecho de mantener una instalación de gas sale bastante más caro que una de aerotermia, ya que, pese a que la inversión inicial de esta última sea más elevada, se puede amortizar en relativamente poco tiempo. Por este motivo, el coste de la factura de la luz será bastante más bajo que mantener la instalación de una caldera de gas natural.
Del mismo modo, también podemos decir que entra en juego el factor de sostenibilidad medioambiental. Esto se debe a que una caldera de gas, para funcionar, lo hace gracias a la combustión, lo que libera gases de efecto invernadero, como el CO2, mientras que la aerotermia es un sistema mucho más limpio y sostenible. Además, en la actualidad existen numerosas ayudas y subvenciones -tanto europeas, como nacionales, autonómicas y locales- para fomentar el uso de energías renovables. Con estas, en algunos casos, puedes obtener ayudas superiores al 50% del coste total de la instalación.
La aerotermia no funciona bien en edificios antiguos
Este es otro de los mitos que nos encontramos con mayor frecuencia cuando hablamos de la instalación de sistemas de aerotermia. Esta confusión se puede deber a que los radiadores de aerotermia funcionan a temperaturas más bajas que los sistemas tradicionales, como pueden ser los sistemas eléctricos o los de gas natural. Sin embargo, como el funcionamiento es más continuo y su coste es menor, se pueden mantener en funcionamiento durante todo el día y la noche sin ningún tipo de problema, por lo que se alcanza la temperatura de confort igualmente.
Además, los edificios antiguos se pueden rehabilitar para revisar los cerramientos y los puentes térmicos a fin de incrementar la certificación energética de los mismos para incrementar la eficiencia y la efectividad de los mismos. Por ello, la aerotermia funciona perfectamente tanto en edificios nuevos como antiguos, ya que se puede combinar con suelo radiante, radiadores o unidades de aire acondicionado.
La aerotermia es un sistema que hace mucho ruido
Este es tal vez el mito más extraño de todos, ya que la aerotermia no hace más ruido que el que provoca un aparato de aire acondicionado en pleno funcionamiento. Esto se debe a que la unidad que colocamos en el exterior es muy similar y su funcionamiento es prácticamente el mismo. Por ello, no, la aerotermia no es un sistema de climatización especialmente ruidoso, ya que el nivel de ruido que genera suele estar, como mucho, en torno a los 30 dB cuando se encuentra en pleno funcionamiento, lo que equivale al ruido en un área residencial tranquila, un día tranquilo en el campo o el rumor lejano del mar en una zona costera.
En conclusión, podemos decir que la aerotermia se está alzando como una solución ecológica y eficiente entre los sistemas de climatización actuales. Tratando de explicar los mitos, hemos hablado de su versatilidad en climas diversos, del ahorro a largo plazo frente al gas y su compatibilidad con edificios antiguos. Además, funciona de una manera silenciosa y cuenta con apoyos gubernamentales en forma de ayudas y subvenciones que refuerzan su papel en la transición hacia energías más limpias y sostenibles, consolidando la aerotermia como una alternativa clave en la construcción de un futuro mucho más respetuoso con el medio ambiente.