El aire acondicionado es uno de los sistemas de climatización más eficaces que existen en la actualidad para alcanzar la temperatura de confort en cualquier época del año. Gracias a su tecnología inverter y a su bomba de calor reversible, nos permite disfrutar de un entorno agradable tanto en los meses más fríos del invierno como en los más calurosos del verano, por lo que contribuye directamente al bienestar y la calidad de vida dentro del hogar o en el lugar de trabajo. 

Sin embargo, al igual que sucede con otros equipos de climatización, también puede presentar ciertos fallos o averías con el paso del tiempo. Entre los más frecuentes se encuentran los casos en los que el aire acondicionado gotea o notamos que no enfría correctamente, situaciones que suelen generar molestias y, en algunos casos, preocupaciones sobre posibles daños en el equipo o en la vivienda. 

¿Qué ocurre y qué hago si gotea el aire acondicionado?

Cuando gotea el aire acondicionado, lo más habitual es que exista un problema interno que requiere atención. En términos generales, cuando uno de estos aparatos empieza a gotear es una señal de que algo no está funcionando correctamente en el sistema de drenaje o en el flujo del aire, aunque la causa puede variar según el modelo y el estado de mantenimiento del equipo.

Por norma general, cuando un aire acondicionado gotea, la razón más común suele ser la acumulación de suciedad en los filtros. Con el uso continuado, los filtros atrapan polvo y partículas en suspensión que impiden el paso del aire y provocan la condensación excesiva del agua, lo que termina generando esas molestas gotas. También puede deberse a la obstrucción de los conductos de desagüe, a un desnivel en la unidad interior o exterior, o incluso a una fuga del gas refrigerante que utiliza el sistema para modificar la temperatura de las estancias interiores.

Para intentar solucionarlo, lo más recomendable es limpiar los filtros con agua tibia y jabón, dejar que se sequen completamente y volver a colocarlos. Si el problema persiste, es fundamental contactar con un profesional especializado en climatización para que realice una inspección y determine el origen exacto del fallo. 

Ignorar el goteo en un aparato de aire acondicionado puede acarrear consecuencias más graves, como la aparición de humedades y moho en las paredes, riesgo de cortocircuitos, una pérdida significativa de eficiencia energética o incluso una reducción en la vida útil del equipo, tanto en la unidad interior como exterior. Además, llevar a cabo un buen mantenimiento de aire acondicionado de forma periódica es clave para evitar este tipo de incidencias y prolongar la durabilidad del equipo y garantizando su máximo rendimiento.

¿Qué pasa si el aire acondicionado no enfría bien y qué hacer?

Con el paso del tiempo, es bastante habitual que notes que el aire acondicionado no enfría tanto como antes, especialmente cuando las temperaturas exteriores son más elevadas. Si esto ocurre, es importante no alarmarse, ya que las causas pueden ser muy variadas y no siempre implican una avería grave.

Uno de los motivos más comunes es que el aparato no cuente con la potencia adecuada para el tamaño del espacio que deseamos climatizar. Si el equipo trabaja constantemente por encima de su capacidad, estamos forzando el compresor y otros componentes internos, lo que puede reducir su vida útil de forma considerable y aumentar el consumo energético. En otros casos, el problema puede ser tan sencillo como no haber activado el modo “frío” o “cooly mantener el modo ventilador, que solo mueve el aire sin realmente refrigerarlo.

También conviene revisar la temperatura seleccionada y la velocidad del ventilador. Ajustar estos parámetros puede marcar una gran diferencia en el rendimiento del equipo.  Asimismo, también puede darse por acumulación de suciedad en los filtros. 

Sin embargo, si tras comprobar esto el aire acondicionado no enfría correctamente, puede haber casusas más profundas, como la obstrucción en el sistema de drenaje o un fallo en el compresor o una fuga de gas refrigerante. En estos casos, lo más sensato es detener el uso del equipo y contactar con un técnico especializado para evitar daños mayores a largo plazo. 

Un profesional podrá medir la presión del gas, comprobar la carga del refrigerante y verificar si existen fugas o componentes dañados. Este tipo de revisiones no únicamente sirven para solucionar problemas puntuales, sino que también ayudan a optimizar la eficiencia del sistema y a reducir el consumo de energía. 

¿Qué hacer si el aire acondicionado gotea y no enfría?

Cuando coinciden ambos síntomas —el aire acondicionado gotea y además no enfría bien—, el problema probablemente sea más serio. En estos casos, la combinación de humedad y bajo rendimiento puede estar relacionada con un fallo general en el circuito de refrigeración o con una obstrucción importante en el sistema de evacuación del agua.

Lo primero que se debe hacer es apagar el equipo y no intentar forzarlo. Después, conviene revisar los filtros para comprobar si están limpios y verificar visualmente si la bandeja de condensados está llena o se desborda Si el goteo proviene de la unidad exterior, podría tratarse de un exceso de condensación causado por un gas refrigerante insuficiente o de una fuga interna.

En estas circunstancias, lo más recomendable es solicitar la asistencia de un técnico de climatización para realizar una revisión exhaustiva. Un profesional podrá determinar si se trata de un fallo del compresor, de una obstrucción en el drenaje o de un desequilibrio en la instalación. Además, revisará la presión del gas, el estado de las válvulas y la inclinación de las unidades, elementos que pueden parecer menores pero que influyen directamente en el rendimiento del equipo.

En definitiva, podemos decir que, si notas que gotea el aire acondicionado, actuar con rapidez no sólo evitará que el problema se agrave, sino mantener la eficiencia del sistema y prevenir daños estructurales o eléctricos en el entorno. Es decir, que llamar a los mejores especialistas, como los que encontrarás en TSclima, para instalar tu sistema de climatización y realizar revisiones cada cierto tiempo te ayudará a disfrutar de un ambiente más saludable, seguro y confortable durante todo el año.