Cuando aprieta el calor o el frío, la acción más habitual en la mayoría de los hogares es coger el mando y encender el aire acondicionado para mantener una temperatura agradable en el interior del hogar. De esta manera, sea invierno o verano, podemos disfrutar de la comodidad de nuestra vivienda a lo largo de todas las estaciones del año.
Pero, aunque no es una novedad, de su uso se genera agua, ya que los aparatos de aire acondicionado funcionan mediante mecanismos que permiten el control de la temperatura del aire. Para su funcionamiento se realiza un proceso de evaporación y condensación. En este proceso, el aparato condensa la humedad ambiental y la expulsa al exterior en forma de gotas de agua mediante un sistema de desagüe que contienen todos los aparatos.
Las máquinas de aire acondicionado pueden llegar a producir entre 1 y 5 litros de agua a la hora, dependiendo de la humedad existente en el ambiente. Este es un dato importante y positivo para el medio ambiente, ya que existen muchas zonas del planeta en las que hay escasez de agua y, por ello, las condiciones de vida son muy complicadas.
Sin embargo, no tenemos que irnos muy lejos, ya que nuestro país está año tras año más cerca del riesgo de sequía debido a las escasas precipitaciones de los últimos tiempos. Por ello debemos ser conscientes de la importancia de aprovechar el agua, ya que, aunque no lo parezca, es un bien escaso que debemos tratar como si se tratase de oro puro. Por ello, si quieres aprovechar el agua que genera este aparato, existen algunos trucos para el agua del aire acondicionado de los que vamos a hablar en este artículo.
Usos del agua del aire acondicionado
Aunque el agua que genera un aparato de aire acondicionado no es potable ni apta para el consumo humano ni de animales, se puede utilizar para realizar distintas tareas y, así, evitar utilizar agua potable. Con ello, se consiguen grandes beneficios para el medio ambiente y para la economía del hogar, reduciendo el precio de la factura del agua.
El agua normalmente se presenta en forma de agua limpia y transparente, pero puede contener impurezas provenientes del aire. Sin embargo, en un hogar en el que se fuma, en que hay insectos, polvo o polen pueden hacer que el agua aparezca turbia.
Sin embargo, aunque se presente de forma cristalina sigue siendo no apta para el consumo humano, ya que el aparato de aire acondicionado puede tener hongos y bacterias en sus filtros que pueden contaminarla sin que resulte apreciable a simple vista. Pero esto no quiere decir que no pueda darle ciertos usos para la realización de diversas actividades que permitan cierto ahorro de agua potable.
Para planchar la ropa
El agua que produce el aire acondicionado es perfecta para usarse en las planchas que funcionan con vapor. Como el aparato obtiene el agua del ambiente, no contiene cal ni restos minerales, por lo que no hay peligro de que obstruya los conductos de la propia plancha ni de que deje manchas en la ropa. Así, puedes ahorrar algunos euros al año, ya que no necesitarás comprar agua destilada específicamente para usarla en esta tarea.
Para la cisterna del baño
Es una de las mejores ideas que existen para ahorrar una cantidad bastante grande de agua potable al cabo del año y respetar el medio ambiente. Existen dos opciones: colocar el tubo de agua del aire acondicionado en el interior de la propia cisterna o bien echarla en en un cubo y echarla de manera manual. Nosotros preferimos la primera de las dos, ya que es más cómoda, pero tú eliges.
Para la limpieza del hogar
Para realizar las tareas de la limpieza del hogar con este tipo de agua, debes fijarte en si se presenta clara o tiene un toque turbio. Si presenta un color oscuro no recomendamos su uso, ya que puede tener muchas impurezas e incluso gran cantidad hongos y bacterias que no conviene esparcir por tu hogar. En este caso, te recomendamos que limpies los filtros de tu aparato o que llames a un especialista para que revise tu instalación.
Si el agua que extrae tu máquina de aire acondicionado es clara y cristalina la puedes utilizar para limpiar los cristales de las ventanas y para fregar el suelo. Tan sólo debes añadirle algún producto de limpieza como friegasuelos o lejía, como se suele hacer de manera habitual en la limpieza de la casa. Sin embargo, no te recomendamos usar esta agua ni para fregar los platos ni para limpiar las superficies donde vayas a manipular alimentos.
Para limpiar el coche
Es otro de los usos del agua del aire acondicionado que puede permitir ahorrar miles de litros al cabo del año en la limpieza de tu vehículo. Esto se debe a que en los servicios de autolavado o en el uso de una manguera de jardín se desperdicia una buena cantidad de agua que se puede ahorrar usando esta agua.
Tan sólo necesitas llenar el cubo, utilizar jabón y un trapo de microfibra para lavarlo con mucho mimo hasta dejarlo reluciente. Además, al igual que sucede con la plancha, no necesitas utilizar agua destilada para limpiar el depósito del limpiaparabrisas y del radiador, con lo que ahorrarás cierto dinero al cabo del año.
Para regar las plantas
Este es un punto que genera bastante polémica de entre todos los trucos para el agua del aire acondicionado, ya que no se sabe a ciencia exacta si puede utilizarse o no para regar las plantas. Existe la opinión de que, si esta agua no es apta para el consumo humano ni de animales, tampoco debe serlo para las plantas.
Sin embargo, en 2018 se publicó un estudio que demostró que, por sus características físicas y químicas, el agua producida por el aire acondicionado es adecuada para el riego de plantas, aunque carece de sales minerales, por lo que deberás de recurrir a un fertilizante para aportar al agua los nutrientes necesarios.