Existen muchas maneras de proporcionar climatización a nuestros hogares para lograr una temperatura en la que nos sintamos lo más cómodos posible. Entre estas alternativas, durante los últimos años ha ganado mucha importancia y protagonismo el suelo radiante

Este es uno de los sistemas más innovadores de climatización y que busca la máxima eficiencia en cuanto al consumo eléctrico se refiere. Por ello, se considera bastante más ecológico que el resto de las alternativas, además de repercutir notablemente en la factura de la luz.

Así pues, este sistema se caracteriza por repartir el calor o el frío de manera uniforme a través de toda la superficie del suelo. Por eso, este método garantiza que todas las habitaciones de la vivienda o del interior de cualquier local conserven la misma temperatura independientemente de la orientación o distribución de las habitaciones y dependiendo de la incidencia del sol.

Sin embargo, su instalación es bastante compleja y costosa, ya que tiene la particularidad de realizarse debajo del suelo. Esta se realiza instalando unos tubos en cuyo interior se hace circular agua u otro fluido que sirve para transmitir tanto el calor como el frío. Así, estos tubos forman una especie de circuito circular por los que fluye el líquido a través impulsado por unos generadores mediante un sistema de envío y retorno.

Para lograr el mejor resultado, el suelo debe llenarse completamente de este sistema de tubos que luego se deben cubrir por una placa de mortero que cumple la función de almacenar y transmitir al resto del suelo el calor que estos generan. Por ello, la distribución de la temperatura es prácticamente igual en toda la superficie del suelo. Así pues, es ideal para usarse tanto en verano, con temperaturas elevadas como en invierno, cuando hace frío. 

Como hemos dicho el principal inconveniente que presenta el suelo radiante es que se tiene que instalar bajo el suelo. Esto obliga a realizar una obra para levantar todas las baldosas del suelo. Por ello, mucha gente se echa atrás cuando piensa en instalarlo. Sin embargo creemos que el mejor momento para hacerlo es mientras tiene lugar la reforma de la vivienda. Sin embargo, existen otra serie de inconvenientes como, por ejemplo, que deje de calentar o de funcionar sin motivo aparente. 

Por eso, en este artículo te vamos a explicar por qué el suelo radiante puede dejar de calentar o hacerlo de una manera poco eficiente y vamos a exponer las posibles causas y qué podemos hacer para encontrar una solución.

Causas por los que el suelo radiante no calienta y soluciones

Como hemos comentado, el suelo radiante tiene muchas ventajas, sin embargo, en ocasiones puede fallar y darnos cuenta de que o bien no calienta como es debido, o no calentar en absoluto. Por ejemplo, también puedes notar que algunas áreas de la casa se calientan más y otras menos, lo que es indicativo de que algo no está funcionando de manera correcta. Esto puede estar dando por diferentes motivos.

Se puede haber dado una sobrecarga eléctrica o un sobrecalentamiento

En el caso de una sobrecarga eléctrica se puede deber a que la fuente de alimentación del sistema del suelo radiante presenta un fallo en su funcionamiento. En el segundo caso, se puede estropear en determinadas zonas del hogar debido a que el sistema no ha podido soportar el calor emitido y se haya sobrecalentado. 

En cualquier caso, no deberías manipular la instalación por tu cuenta, sino llamar a un electricista para que revise el sistema e identifique a qué se puede deber el problema. Así, se encargará de arreglarlo para que puedas seguir disfrutando de una correcta climatización en tu hogar.

Se puede haber producido una fuga del líquido refrigerante

Existe la posibilidad de que se haya producido una fuga por lo que, al no haber líquido refrigerante, el sistema no calienta en absoluto. Normalmente, este tipo de problemas se debe tanto a las mordeduras de los roedores que haya bajo el suelo como a una mala realización del sistema de tuberías. 

Para solucionarlo, deberás de ponerte en contacto con un profesional en la materia para que localice dónde está la fuga y proceda a repararla. Normalmente este tipo de problemas puede ser bastante caro, ya que obligará a levantar todas las baldosas para acceder al sistema de tuberías, por lo que deberás obrar para volverlas a poner. El técnico identificará qué tuberías están afectadas, las sustituirá por otras nuevas y comprobará que el problema de la fuga está resuelto.

Puede que el suelo radiante necesite una limpieza

Existe un indicio bastante claro de que el suelo radiante puede necesitar una limpieza por parte de un profesional. Este se basa en que existen ciertas zonas en tu hogar en las que se produce un mayor calentamiento y enfriamiento que en otras. Es decir, cuando el calentamiento es irregular.

Por ello, es importante revisar la instalación cada año para comprobar si hay suciedad acumulada (puede ser la formación de algas u otros agentes microbianos) o burbujas de aire en las tuberías que puedan terminar generando averías o fugas en el sistema. 

Como solución al problema de las burbujas lo que debes hacer es purgar el suelo radiante. Puede que tu instalación cuente con purgadores manuales o automáticos que permitan extraer estas burbujas del sistema. 

Sin embargo, para limpiar el interior de las tuberías si se han formado pequeñas acumulaciones de algas, se puede utilizar un lodo físico o químico. Este actuará impulsando un mezcla de agua y aire en el interior de los propios conductos que permitirá arrastrar toda la suciedad limpiando el sistema de manera eficaz.

Básicamente, estos son los principales problemas que se pueden dar cuando una instalación de suelo radiante no funciona o no lo hace de manera correcta. Algunas de las soluciones son más sencillas que otras pero, pensamos que, pese a todo, las ventajas que presenta son mucho mayores que los inconvenientes, ya que el nivel de confort que ofrece es impresionante. 

Esperamos que este artículo te haya ayudado a resolver tus dudas respecto a este tema y que, si tienes un problema con tu suelo radiante, lo puedas solucionar fácilmente. En el caso contrario, te recomendamos que te pongas en contacto con un profesional que te ayude a encontrar una solución.